"A la magia de las historias no la va a reemplazar Internet" Por Patricia Rodríguez
Lo dijo el narrador cordobés Oscar Salas, quien presentó el
espectáculo Cuentos, canciones y dibujos, en el marco del 5º Mayito de las
Letras, que organiza el Ente Cultural de Tucumán.
Captar la atención de los niños no es fácil en tiempos de
alta tecnología. Pero al narrador Oscar Salas no es tema que le inquiete en lo
más mínimo. No bien pisa el escenario con su espectáculo- taller Cuentos,
canciones y dibujos se pone a los chicos en los bolsillos. El cordobés vino a
Tucumán, junto al músico Santiago Ortiz para participar del 5º Mayo de las
Letras que se desarrolló del 3 al 11 de mayo, organizado por la Dirección de
Letras del Ente Cultural de Tucumán.
Oriundo de Alta Gracia (Córdoba) además de narrador es
escritor, ilustrador, humorista gráfico y músico. Publicó en las revistas
Hortensia, Rico Tipo, Humor, Caras y Caretas, entre otras. Entre sus libros
editados se encuentran: El cuco ya fue, El Desenredador de Estrellas,
Pueblo Barrilete, El día en que las abuelas perdieron la memoria, Cuatro Brujas
y un garbanzo, Jerónimo , El increíble barco del capitán
Cuerdafloja, El rey Bromín y el misterio de los vientos perdidos y
Cuenta Destraba y Adivina.
Sus libros se utilizan como material didáctico en las
escuelas y han sido incluidos en diferentes publicaciones institucionales.
Junto al músico Santiago Ortiz, editó el
disco "Canciones de la luna, luna". Colaboró con los libretos de
“Doña Jovita”. Es autor de la tira “Jerónimo” que publica el
diario La Voz del Interior. Realizó, además, los dibujos de la
tira Inodoro Pereyra, de Roberto Fontanarrosa. En junio de 2011 presentó su
primera novela: El talismán de la bruja.
-Con tantos estímulos tecnológicos que tienen los
chicos, ¿es un desafío lograr la atención?
-Para nada, esto puede ser punto de vista particular, a
pesar de Internet y playstation, hay una cosa muy mágica que se produce cuando
hay un narrador y un chico que está escuchando un cuento. Se produce un nexo
mágico y no hay nada tecnológico ahí, no media nada más que la palabra entre el
emisor y el receptor. Toda esa magia que crean las historias contadas no la va
a reemplazar ningún medio tecnológico, ni las computadoras. El tema de la oralidad
y las historias contadas no van a morir nunca, nuestra experiencia nos
demuestra eso en cada espectáculo que hacemos.
-¿Qué trajiste en tu valija para este 5º Mayito de las
Letras?
-En este segundo viaje, el año pasado también nos
convocaron, venimos a dar este show que en realidad es un taller,
donde nosotros les contamos a los chicos un poco cómo es la cocina del
escritor. Cómo hace un escritor para contar un cuento, que es como un misterio,
incluso la figura del escritor para los chicos ya es un misterio porque no se
lo imaginan. La figura del escritor es una figura bastante abstracta, inasible,
entonces ellos van a ver un escritor trabajando, van a descubrir secretos. Van
a descubrir cómo podemos inventar un cuento jugando con las palabras, jugando
con los dibujos y con la música, ya que también somos dos músicos en escena.
El taller está hilado con canciones. Santiago (Ortiz) aparte
de escritor, es compositor, ha musicalizado todos mis trabajos. Esas canciones
van hilando todo mi trabajo, todo el taller. Tiene la estructura de un
espectáculo musical.
-¿Cuál es el objetivo del espectáculo-taller?
-Es muy importante acercarle a los chicos la figura del
escritor y los objetivos que tenemos es encarar la literatura como juego para a
su vez crear literatura, porque el juego es la actividad natural de los chicos.
Queremos que los chicos al finalizar el taller se descubran a sí mismos como
potenciales escritores y lectores también.
El espectáculo también es una puerta de entrada a los libros
y para que los chicos expresen ideas y comiencen a escribir. A partir de la
premisa de que el juego es la actividad natural de los chicos, los invitamos a
ser escritores y fundamentalmente a desarrollar la creatividad y a desarrollar
el tema de la expresión.
Este taller también tiene un valor agregado para el docente
por la expresión misma. Es decir voy a contar un cuento, pero voy a usar mi
cuerpo, voy a cantar, voy a jugar. Yo creo que el tema de la expresión es
fundamental en el aula. Entiendo que el maestro debe expresarse y divertirse
con sus alumnos a la hora de enseñar.
-¿Tenés reglas para contar un cuento?
-En realidad nosotros trabajamos de una forma bastante
libre. Creo que todo el taller tanto desde lo literario como del armado del
espectáculo lo encaramos por el lado del juego, a pesar de que se trata de algo
muy trabajado profesionalmente, cuidamos mucho los detalles. Nosotros no
venimos a mostrar qué bien que se escribe ni qué bien que se toca la música,
sino a proponer el juego creativo. Tenemos premisas muy básicas, pero nuestra
premisa fundamental es que el taller sea cien por ciento creativo.
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